
De momento son Ford y la Universidad de Liverpool los que está desarrollando esta tecnología para los motores de coches, pero nada parece indicar que no se pueda utilizar en motores del tipo de los utilizados en las motos, donde la combustión y el llenado se ven muy comprometidos por los altos regímenes de giro. Hace unos días comentábamos que Yamaha había patentado un motor diésel para moto y que los motores de gasolina están cerca del final de su evolución, pero me parece que si esto sigue adelante todavía tenemos un paso más en favor de la gasolina y las altas prestaciones.
Vía | Moto22