Un año más, y antes de la parada en la plaza de toros de Las Ventas de Madrid, los Red Bull X-Fighters han hecho escala en Fort Worth, Texas, para celebrar la tercera prueba puntuable del campeonato. En esta ocasión los freestylers realizaron sus actuaciones sobre un enorme trazado construido con 4.200 m³ de tierra, en el que habían 15 tipos de rampas diferentes que podían catapultar a los pilotos a 15 metros de altura en saltos de hasta 40 metros de longitud.
Al principio de la velada el público quedaba enmudecido cuando el francés Thomas Pagès se convertía en el primer piloto que intenta un frontflip (un backflip hacia adelante) en competición. Por desgracia Thomas perdía el control de su moto y caía al suelo como una losa. El galo tuvo que ser evacuado del trazado con una lesión en la cadera diagnosticada por el equipo médico.
Tras este susto inicial y con una temperatura que alcanzaba los 41 grados centígrados, el australiano Cameron Sinclair se las arregló para mantenerse "frío" y completó dos backflips dobles en pleno evento: "Nunca se había visto un backflip doble en una competición así. Realmente, no me importa haber sido eliminado en las semifinales, ¡porque ya me siento suficientemente feliz por no haberme caído!". Cameron tuvo que recibir ayuda para bajar de la moto después de esos espectaculares trucos, ya que los duros aterrizajes, tras llegar a los 10 metros de altura, le dejaron el cuerpo muy entumecido al tener varias contusiones.
El español Dany Torres fue eliminado por el propio Sinclair en la ronda de los Cuartos de Final: "La verdad es que me siento muy satisfecho con el mero hecho de haber podido participar. Mi rodilla me ha estado doliendo muchísimo después de mi caída en los entrenamientos. He de felicitar a Sinclair, hoy es un día histórico para el FMX."
El suizo Mat Rebeaud se benefició del estado físico de Sinclair y pasó a la final, donde se vio las caras con el hombre que venció el evento, el norteamericano Nate Adams, que antes se había deshecho del japonés Eigo Sato en la Semifinal.
El ganador del evento de Calgary, el australiano Robbie Maddison, mostró al público que Texas es un lugar para los hombres de verdad. Robbie se había dislocado un hombro después de un duro aterrizaje para, acto seguido, ponérselo él mismo en su sitio: "No podía parar. Los espectadores eran fenomenales y la verdad es que tenía muchas ganas de hacer un truco más."
El vencedor del evento, Nate Adams, subrayó el estatus del certamen: "Los Red Bull X-Fighters son lo mejor del FMX. No hay nada que se pueda comparar con ganar a este grupo de atletas de nivel mundial".
Tras la cita de Texas el japonés Eigo Sato es el que lidera la clasificación general del campeonato con 215 puntos, seguido muy de cerca por Mat Rebeaud, con 210 y de Robbie Maddison, con 145. Pese a gozar de una sólida posición en la tabla, tanto Sato como Rebeaud aún no han ganado ninguna prueba en lo que llevamos de temporada. Recuerda que el espectáculo de los Red Bull X-Fighters se desplaza a Madrid (los días 16 y 17 de julio), antes de acabar en la capital del Reino Unido, Londres, el día 22 de agosto.
Un año más, y antes de la parada en la plaza de toros de Las Ventas de Madrid, los Red Bull X-Fighters han hecho escala en Fort Worth, Texas, para celebrar la tercera prueba puntuable del campeonato. En esta ocasión los freestylers realizaron sus actuaciones sobre un enorme trazado construido con 4.200 m³ de tierra, en el que habían 15 tipos de rampas diferentes que podían catapultar a los pilotos a 15 metros de altura en saltos de hasta 40 metros de longitud.
Al principio de la velada el público quedaba enmudecido cuando el francés Thomas Pagès se convertía en el primer piloto que intenta un frontflip (un backflip hacia adelante) en competición. Por desgracia Thomas perdía el control de su moto y caía al suelo como una losa. El galo tuvo que ser evacuado del trazado con una lesión en la cadera diagnosticada por el equipo médico. 
